Lo lógico y "clásico" es que sea para todos

No es verano sin bermudas, olor a salitre y los festivales que planean por nuestra geografía cual mosca around sandía. Excitados por esa sensación de chorreo cultural entre nuestras manos, le sacaremos bien el jugo a uno de ellos. Por supuesto, hablo del Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida.

Bicicletas gratis... si dejas el coche en el garaje

 

A nadie se le va a abrir la boca del asombro si digo que los países nórdicos nos llevan años de adelanto en en eso de la sostenibilidad y la transparencia. Vamos, en dos palabras: sentido común. Que sí, que en España tenemos solazo, fiesta y siesta, de acuerdo. Pero vamos a fijarnos por una vez y sin complejos en cómo hacen las cosas allí para convivir con el entorno y seguro que al menos una buena idea o sabor de boca nos llevamos.

Libros de texto gratuitos

Ahora que vamos apurando el curso escolar y con vistas al siguiente (vale sí, queda mucho, pero ya sabemos lo rápido que pasa el verano y lo que se tarda en poner en marcha algunas cosas entre que se difunden y se llevan a la práctica) he decidido recopilar una serie de iniciativas que dan valor a la Educación Pública y la hacen aún más accesible para todos.

Niños a los que el hospital no les impide ser niños

Hay noticias que a uno le alegran el día... En enero hablamos en la radio de una iniciativa (min 24) de la Fundación Juegaterapia con la que consiguieron convertir una azotea del Hospital de La Paz de Madrid en un jardín de juegos para los niños que pasaban largas temporadas hospitalizados por enfermedades que ojalá no existieran. 

¿Virgen con los MOOC´S?

Ha llegado el momento de hablar de uno de mis temas preferidos porque a diferencia del trueque, los bancos de tiempo u otras iniciativas similares, éste lleva relativamente poco tiempo en marcha y ha venido no sólo para quedarse sino para reinventarse un día sí, y el siguiente también.

Vacaciones por tu cara bonita

Ya sé que todavía queda mucho para llegar a ese ansiado primer descanso vacacional del año pero, ¿y por qué no nos vamos a recrear en algo con lo que todos salivamos? Ah, que estás en el paro y no hay ni pa pipas. O que tus ahorros (porque no hay manera de encontrar financiación) los vas a dedicar a ese proyecto que te pondrá en el mismo sarao que el Zuckerberg. O sí, tienes trabajo pero han hecho una modificación sustancial de condiciones laborales (lo que en cristiano se llama bajarse los pantalones viendo el percal que hay) en tu empresa y la línea de flotación está en tu flequillo. 

Encantados de que nos salpique. El trueque ex-pan/plo-sivo

 
Este post entraña un poco de nostalgia para mi porque desde pequeño he mamado ese intercambio natural entre personas cercanas con la ida y venida, en ambas direcciones, de huevos frescos, chacina, productos de la huerta o incluso turnos entre vecinos para llevarnos al colegio. Nunca requirió un libro de entradas y salidas para registrar quién aportaba más porque se hacía de buena voluntad y el propio sistema era sostenible y solidario, sin parafernalias.

Tomates que saben a tomate (si lo recuerdas)... en el balcón

Banco de semillas en el Matadero de Madrid

No sé vosotros, pero yo estoy harto de comer tomates que podrían ser parte de un bodegón en medio de la mesa camilla de la casa que la tía Herminda dejó abandonada en el pueblo hace años. Sí, de esos de plástico sobre mantel de ganchillo. Contradictoriamente, a esa misma casa llegaban por entonces frutas y hortalizas bien jugosas que chorreaban al mínimo mordisco.